La Ley especial de preservación de la paz en tiempos de guerra (戦時特別治安維持法 Senji Tokubetsu Chian Iji-hō?), la Orden Presidencial #6609, fue una ley promulgada por la República de San Magnolia en el Año de la República 358 (Año Estelar 2139), poco después del inicio de la guerra con el Imperio Giadiano. Declaraba a todas las personas de ascendencia colorata como partidarios del Imperio, y permitía revocar sus derechos civiles y confiscar sus propiedades.
Historia que rodea a la promulgación del acta[]
Cuando la Legión destruyó el ejército de la República, ésta decidió evacuar a sus ciudadanos a 85 sectores administrativos centrados en torno a la capital, una zona terrestre mucho más pequeña que podía defenderse más fácilmente. Como los 85 sectores carecían del espacio y los recursos necesarios para acoger a toda la población, el gobierno eligió a los Colorata para expulsarlos, una clara violación de los cinco principios morales de la República: libertad, igualdad, filantropía, justicia y nobleza.
La razón por la que la Ley Especial de Preservación de la Paz en Tiempos de Guerra discriminaba descaradamente a los Colorata tenía dos factores: el racismo y el patrioterismo. La República era la patria de la etnia Alba, mientras que los Colorata eran inmigrantes de otros países o descendían de parejas Alba-Colorata. Además, la República fue la primera democracia moderna del mundo, mientras que los países de los que procedían los Colorata, incluido el Imperio Giadiano, eran monarquías. Surgió la creencia de que la defensa de la democracia por parte de los Alba, la forma de gobierno más humana, los convertía en una raza superior, mientras que los Colorata eran bárbaros practicantes del imperialismo y, por tanto, simpatizantes del Imperio e inferiores a los Alba. También se rumoreaba ampliamente que la derrota del ejército de la República se debía a los espías Colorata, y no a la verdad de que la República era tecnológicamente deficiente en comparación con el Imperio.
Aunque los Colorata e incluso algunos Alba protestaron contra la nueva ley, la República sofocó violentamente cualquier disidencia e hizo que los Colorata fueran trasladados a un Sector Ochenta y Seis no oficial, donde pasaron a ser conocidos como los Ochenta y Seis. Estos exiliados involuntarios fueron obligados a trabajar en la construcción del Gran Mur, la muralla defensiva que rodea los 85 sectores, y sus propiedades y pertenencias fueron confiscadas para pagarla. Los Ochenta y Seis fueron posteriormente reclutados para servir como Procesadores para operar el M1A4 Juggernaut de la República. Dado que los Ochenta y Seis estaban oficialmente clasificados como no humanos, los Juggernauts se consideraban drones en lugar de vehículos pilotados, y a pesar de las crecientes pérdidas de miles de Colorata en la batalla contra la Legión, la República afirmó oficialmente que la guerra ya no causaba bajas humanas.
Curiosidades[]
- La orden se inspiró en la Orden Ejecutiva 9066 emitida durante la Segunda Guerra Mundial por el presidente Franklin D. Roosevelt. La orden autorizaba el encarcelamiento de los japoneses-americanos en campos de concentración.